FUNDAMENTOS DE FN-I:

1.       El origen de nuestro movimiento

2.       Explicando el concepto «Nacional-Identitario»

3.       Realidad Étnica Criolla

4.       Identidad étnica en la sociedad chilena

5.       La Nacionalidad Chilena

6.       Un Movimiento Criollo

Históricamente, la idea de nacionalidad chilena se basó en el deseo de las autoridades locales por romper con la sujeción a la monarquía española, y no en la afirmación de una específica Identidad étnica. La chilenidad, más que una identidad, fue una actitud política. Actualmente, la nacionalidad chilena es una herramienta jurídica para el ejercicio del poder sobre la mayor cantidad de población posible. Esta excesiva amplitud en sus límites ha relativizado su contenido, y motivado así su desvalorización para las personas que la integran.

Al tratarse de un vínculo con notoria pretensión hegemónica y universalista, se delata fácilmente como un producto de la Ilustración.  Sin embargo, no conviene desgastarse en debates para demostrar si la nacionalidad chilena nos es o no aplicable. En ese sentido, «la batalla por la chilenidad” ya está decidida: es y será chileno quién según el ordenamiento jurídico vigente sea considerado como tal. Sencillo.

Si bajo una misma nacionalidad – en este caso la chilena – es posible encontrar personas que biológica, psíquica, y culturalmente son muy diversas, significa que dicha nacionalidad ha sido elaborada de espaldas a la realidad étnica. Si la adquisición de esta nacionalidad se satisface simplemente mediante procesos burocráticos – meros trámites – significa que en la práctica,cualquier persona podrá adquirirla, y que por tanto, más allá de ciertas ventajas jurídicas, la referida nacionalidad ha sido vaciada de todo contenido étnico.

Lo que queda por hacer no es negar la existencia de la nacionalidad chilena, sino que replantear el valor que ésta pueda tener al interior de las relaciones criollas. En FN-I proponemos tres ideas básicas para una adecuada valoración de la nacionalidad chilena a la luz de nuestro pensamiento:

1. La nacionalidad chilena es un vínculo puramente jurídico: A este respecto resulta conveniente superar romanticismos surgidos de convenciones históricas, políticas, y no-étnicas, para así comprender a la nacionalidad chilena como lo que exclusivamente es: un vínculo jurídico, cívico, y por tanto, artificial.
2. La nacionalidad jurídica es diferente de la nacionalidad étnica: La nacionalidad jurídica (chilena) es determinada por el Derecho vigente, y comprende a cualquiera que cumpla con ciertos requisitos legales. Involucra el ejercicio del poder político del Estado. Por su parte, la nacionalidad étnica (criolla) está determinada por la correspondencia de la persona con una Identidad, comprendiendo únicamente a quienes la comparten tanto objetiva como subjetivamente.
3. La nacionalidad étnica debe primar moralmente sobre la nacionalidad jurídica. El vínculo jurídico es abstracto (ficticio), mientras que el vínculo étnico es orgánico (vivo). El primero es fruto de la convención y del poder, mientras que el segundo es resultado de un proceso adaptativo y colaborativo, expresión directa de la Vida, y del que surge un deber de lealtad para quienes compartan una misma Identidad. De lo anterior se concluye la primacía de la nacionalidad étnica por sobre la puramente jurídica.

En Fuerza Nacional-Identitaria postulamos la subordinación de los intereses políticos a los intereses étnicos, estando estos últimos determinados en relación a la supervivencia colectiva.