Amebix fue una de esas bandas punk cuya propuesta era más nihilista, apocalíptica y negativa que la generalidad izquierdista pro-todo en la que evolucionó el punk años después. Sin ir más lejos, bandas como Amebix, Discharge, GBH, etc. tienen bastante poca relación con las bandas pro-LGBT, pro-veganismo, pro-derechos de los animales, y de temáticas repulsivamente humanitaristas y políticamente correctas. Además, Amebix tenía un dejo a Venom que los hacía más oscuros que otras bandas punk. Luego de la disolución de Amebix a fines de la primera década del siglo XXI, Rob “The Baron” Miller, bajista y vocalista de la banda crust punk, une fuerzas con Michel Langevin, baterista de Voivod, para formar Tau Cross, banda que combinaba los estilos de ambas bandas y los mezclaba con ocultismo y denuncias a la ingeniería social.
Luego del lanzamiento de los álbumes Tau Cross (mi favorito) en 2015 y Pillar of Fire en 2017, la banda grabó su tercer disco, llamado Messengers of Deception, que sería lanzado a través de Relapse Records. Los problemas surgieron en Julio de este año cuando el disco, ya grabado, estaba siendo preparado para su lanzamiento, hasta que el sello Relapse Records rompió relaciones con la banda y quitó todo el material de ésta de su catálogo, y también quitó el videoclip de “Burn With Me”, el primer adelanto de Messengers of Deception. ¿La razón? El sello solicitó a los miembros de la banda que enviaran su lista de agradecimientos para ser colocados en el inserto, y The Baron agradeció, entre otros, a Gerard Menuhin, autor del libro Tell the Truth and Shame the Devil. Como judío antisionista, Menuhin denuncia al estado de Israel y, en el libro antes mencionado, hace una exhaustiva revisión de la historia oficial, denunciando la política exterior del estado israelí y los tratos represivos a las masas palestinas, junto con criticar a la Unión Europea y el apoyo norteamericano para mantener con vida a la Unión Soviética. El escritor Salvador Borrego podría guardar un parecido con los temas tratados por Menuhin.
Relapse Records es un sello de música violenta y extrema (Cryptic Slaughter, Dying Fetus, Brutal Truth, Exhumed, Mortician, Suffocation, etc.). Como básicamente la industria de la música se basa en vender discos, todo lo que pueda significar ventas es bueno, y lo que pueda bajar las ventas es malo. Si la relación del sello con Tau Cross aumenta las probabilidades que Relapse Records baje sus ventas, entonces cortar relaciones con la banda no es descabellado. Está en su derecho y el mercado es libre. No obstante, si esta probabilidad de caída en las ventas es provocada por un saludo dentro de un inserto, quiere decir que el público que mantiene con vida a sellos como Relapse Records está enfermo de corrección política: por una parte, oyen canciones que hablan de necrofilia, suicidio, necrofagia y violencia, pero rechazan referencias políticas si es que éstas pueden ser relacionadas con discriminación.
There’s no point in living
Rip your fucking head off
Slut you’ve lost your privilege
Hate shows no resistance
Fuck your righteous ways
Gone, dead, fucking wasted
With your throat in my hands
Dying Fetus, “Raped on the Altar”
Bile-baiting is child’s play, second nature of the beast
To serve up a bilious buffet for our feculent, feral feast
A thrill-kill marathon to hyper-stimulate the reptile brain
Tune in, turn on, to a titillating thanatotic refrain
If you bleed it, they will come
To feast upon what’s spewed from humanity’s rectum
Exhumed, “Necrotized”
Por otro lado, como si la corrección política no fuera suficiente dentro del mundo de la música “extrema”, se suman los nauseabundos discursos de izquierda vomitados por vergonzosos sitios web como MetalSucks[1], que no se han demorado en denunciar a The Baron como un teórico de la conspiración que alberga puntos de vista odiosos, racistas y misóginos[2]. Estos sitios han contribuido a que la música extrema se vaya transformando progresivamente en un espacio seguro donde el humanitarismo y el igualitarismo son la regla, dejando atrás el espíritu primigenio del Heavy Metal para transformarlo en una caverna progresista, izquierdista y mediocre. Es de esperar que el disco salga editado por otro sello que apunte a un público menos hipersensible y que devuelva el extremismo a la música extrema, y que The Baron siga denunciando al panóptico más allá de los límites de la corrección política.
No wall, no guard, no wire, no yard
We are the perfect prisoner.
Notas.
[1] http://www.metalsucks.net/2019/07/05/rob-miller-from-tau-cross-stupid-full-of-shit-of-both/
[2] http://www.metalsucks.net/2019/07/06/tau-crosss-rob-miller-issues-new-statement-doubling-down-on-conspiracy-theory-and-misogynist-rhetoric/